La felicidad no está en los años, en los meses, en las semanas, ni en los días; sino en los momentos.
"Hoy es el mañana de ayer" y la vida siempre nos sorprende; es por esto que debe aprenderse a vivir el presente, lejos de traumas o pesadillas pasadas y sin que afecten demasiado las expectativas de futuro.
Estamo en un camino. La Felicidad no es una meta, sino un trayecto, una trayectoria que seguir y en la que se debe disfrutar de cada momento. Vivir intensamente es como actualizar y hacer uno pasado pasado, presente y futuro.